Asistencia del Reino Unido ayuda a reducir el comercio ilegal de vida silvestre en el corredor verde entre Guatemala y México
Las áreas protegidas en la frontera entre Guatemala y México se benefician de una mejor aplicación de la ley, una colaboración binacional sostenida y mayores oportunidades económicas para las comunidades rurales.
El embajador británico en Guatemala, Nick Whittingham, visitó Petén del 8 al 10 de marzo para verificar el progreso de un proyecto financiado por el Reino Unido para abordar el comercio ilegal de vida silvestre en la frontera entre Guatemala y México.
Un proyecto de tres años (2020-2023) está abordando el aumento de la caza furtiva de valiosas especies y fauna de madera, que está afectando a la Reserva de la Biosfera Maya de Guatemala (Petén), la Reserva de la Biosfera de Calakmul y la Reserva Estatal de Balamku en México (Campeche).
Reportes oficiales señalan que han sido 22 meses sin presencia de madereros ilegales en la zona fronteriza. Además, se han detenido a 11 personas vinculadas a actividades perjudiciales para el medio ambiente en la zona y se han incautado algunos bienes utilizados por los traficantes.
El proyecto también está ayudando a más de 100 personas a desarrollar medios de vida sostenibles para las comunidades en la ruta a Carmelita. Consiste en emprendimientos que fomentan la producción de pollo, la apicultura, la restauración ecológica de paisajes y el aprovechamiento sustentable del xate.
El Embajador Whittingham visitó la comunidad de San Miguel La Palotada, una de las áreas de trabajo donde se realizan actividades con las comunidades beneficiadas con proyectos de alternativas económicas para la población vulnerable y afectada por el tráfico de vida silvestre.
Wildlife Conservation Society (WCS) está implementando el proyecto en colaboración con Asociación Balam, ACOFOP, CECON/USAC, Foro de Justicia Ambiental de Petén, FUNDAECO, CONAP y el Ministerio Público de Guatemala; y ProNatura Península Yucatán, CONANP y SEMABICC en México.
El Reino Unido se compromete a proteger a los animales y plantas en peligro de extinción de la caza furtiva y el comercio ilegal en todo el mundo. El Fondo para el Desafío del Comercio Ilegal de Vida Silvestre (IWTCF, por sus siglas en inglés) proporciona fondos para proyectos prácticos en todo el mundo que ayudan a erradicar el comercio ilegal de vida silvestre y, al hacerlo, reducen la pobreza.